“Jesús no mencionó el celibato. De hecho, entre los apóstoles había solteros y casados. San Pedro tenía esposa”, explicó el curita Luis Farinello, uno de los 15 sacerdotes argentinos que piden el fin del celibato obligatorio.
A partir del caso del picaròn presidente paraguayo, Fernando Lugo, se destapó la olla sobre una idea que está dando vueltas en la cabeza de los curas católicos desde hace tiempo.
¿Debe mantenerse vigente el celibato obligatorio si se desea servir a Dios? Varios curas dan la cara y se atreven a decir que este mandato debería ser optativo.
Sobre esta cuestión, el Papa Nazitgert, ni siquiera permite que haya algún tipo de discusión. En el país, el cardenal Bergoglio obedece, aunque hay muchos que disienten con ellos.
Según publica la revista Veintitres, el Obispo emérito Joaquín Píña dice que “hay que aceptar que somos humanos y que podemos fallar al celibato, que no es un mandato divino sino una imposición de la Iglesia”.
Y, por su parte, Farinello revela: “yo me enamoré a los treinta años y sé que no es fácil cumplir con esa fidelidad que impone la Iglesia”.
Según el escritor español Pepe Rodríguez, en su libro "Mentiras fundamentales de la iglesia católica", dice que el célibato lo adoptò el Vaticano, por un tema economico, y evitar pagar sueldos a curitas y sus esposas, más los hijos.
A partir del caso del picaròn presidente paraguayo, Fernando Lugo, se destapó la olla sobre una idea que está dando vueltas en la cabeza de los curas católicos desde hace tiempo.
¿Debe mantenerse vigente el celibato obligatorio si se desea servir a Dios? Varios curas dan la cara y se atreven a decir que este mandato debería ser optativo.
Sobre esta cuestión, el Papa Nazitgert, ni siquiera permite que haya algún tipo de discusión. En el país, el cardenal Bergoglio obedece, aunque hay muchos que disienten con ellos.
Según publica la revista Veintitres, el Obispo emérito Joaquín Píña dice que “hay que aceptar que somos humanos y que podemos fallar al celibato, que no es un mandato divino sino una imposición de la Iglesia”.
Y, por su parte, Farinello revela: “yo me enamoré a los treinta años y sé que no es fácil cumplir con esa fidelidad que impone la Iglesia”.
Según el escritor español Pepe Rodríguez, en su libro "Mentiras fundamentales de la iglesia católica", dice que el célibato lo adoptò el Vaticano, por un tema economico, y evitar pagar sueldos a curitas y sus esposas, más los hijos.
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